INGREDIENTES
- Pulpo: 1 Kg
- Laurel: 1-2 hojas
- Sal
PREPARACIÓN
- Si el pulpo es fresco lo limpiamos, dando la vuelta a la capucha (cabeza) para retirar las vísceras y cortando con unas tijeras el pico (boca) en la base. Luego se lava bien con agua. Lo congelamos al menos 48-72 horas así conseguimos ablandarlo y eliminar el riesgo de anisakis.
- Si lo compramos congelado normalmente estará ya limpio.
- Lo descongelamos poniéndolo en el frigorífico 24h. Una vez descongelado lo metemos en agua y lavamos bien bajo el grifo.
- Ponemos al fuego una cazuela con abundante agua (la suficiente para cubrir el pulpo por completo) con un poco de sal y las hojas de laurel (opcional).
- Ahora “asustamos” al pulpo. Cuando el agua entre en ebullición lo metemos en la olla, dejamos que rompa a hervir de nuevo. Lo sacamos entonces, esperamos que el agua rompa a hervir otra vez y lo volvemos a meter. Repetimos el proceso tres o cuatro veces. Debido a los cambios de temperatura bruscos el colágeno se rompe haciendo que el resultado de la cocción sea más tierno y ayuda a que conserve su piel una vez que esté cocido.
- Dejamos cocer a fuego medio 30-40 minutos, dependiendo del tamaño del pulpo, lo pinchamos de vez en cuando, cuando esté blando apagamos el fuego y dejamos reposar unos minutos dentro del agua, no conviene cocerlo en exceso.
- Sacamos el pulpo del agua y lo escurrimos, cuando se pueda manipular lo cortamos en trozos, según el uso que le vayamos a dar.
En casa lo hacemos con la olla expres... ya te contaré en mi próxima receta, meh meh meh
ResponderEliminarLos "caminos del Señor son infinitos..." (afortunadadmente...), ya estare pendiente de tu pulpo.
EliminarUn saludo